Fuente: Cronista – La capacidad instalada bajó a niveles del 2001; pymes advierten que el «golpe» es masivo y aseguran que crece el ingreso de productos terminados desde Brasil, Paraguay, Francia y China.
A diferencia de las pequeñas y medianas empresas nacionales, que enfrentan barreras para importar insumos por la falta de divisas, la apertura comercial está comenzando a colmar las góndolas de supermercados que ingresar bienes a un menor costo a través de grandes distribuidores.
La problemática que pone en riesgo el futuro de las pymes y los puestos de trabajo fue planteada por Daniel Rosato, titulara de Industriales Pymes Argentina (IPA) en la presentación del informe «Las PyMEs en la estructura productiva argentina».
Entre los factores que comenzaron a crear una «crisis pyme» el dirigente industrial apuntó a la caída del consumo en un contexto de alta inflación, falta de incentivo exportador y la apertura de las importaciones lo que ya se está reflejando en la pérdida de empleo.
En este escenario «una mayor oferta de productos importados en las góndolas de los supermercados se convirtió en una bomba de tiempo», dijo Rosato y contó que, entre una amplia variedad de productos chinos, se detectó pan lactal de Brasil; snacks de Paraguay y vajilla de Francia.
«Todos bienes que se fabrican con normalidad en Argentina», señaló y agregó que «en contraste, el sector plástico registró una caída de 50% en la producción y se encuentra prácticamente paralizado».
La preocupación se extiende a la actividad manufacturera textil, de calzado, mobiliario, limpieza y a los proveedores de la industria de electrodomésticos y automotriz, donde se anticiparon paradas técnicas y vacaciones.
«El ingreso de productos terminados que hoy negocian empresarios en viajes al exterior, se va a reflejar en los meses de mayo y junio«, planteó Rosato y pidió al Gobierno medidas anti – dumping para que las pymes sean sustentables. «En los grandes países del mundo la libertad tiene límites», agregó.
El peso de las pyme
Rosato presentó la reedición del Observatorio IPA, un espacio que realiza informes con estadísticas y análisis económico de las variables que afectan al mundo de las pequeñas y medianas industrias, y que estará a cargo del director de la consultora Marca Pyme, Pablo Bercovich, y de su responsable Macroeconómico, Martín Kalos.
El informe mostró una foto inicial del estado de situación de las pymes a diciembre pasado, en donde señaló que en Argentina existen en total 547.970 empresas, de las cuales 536.076 son pymes (el 97,8%) y 11.894 empresas son grandes (el 2,2% restante).
Luego de destacar el peso de la matriz pyme en la estructura productiva de la Argentina, Bercovich alertó sobre una caída de la actividad manufacturera de 12% interanual (diciembre 2023) mientras que el uso de capacidad instalada bajó al 54%. «Se trata de un número más bajo de las últimas décadas, peor a la crisis del 2001», marcó. Este dato refleja un futuro «incierto» para la actividad económica.
En esa línea, Kalos agregó que en el segundo trimestre de 2023 se logró un récord en cantidad de pymes registradas; «el último trimestre fue claramente contractivo y las medidas del gobierno de (Javier) Milei nos meten en una recesión franca y duradera que está poniendo en riesgo a todo el entramado pyme».
Se quejan, se quejan, se quejan. No tienen vergüenza. Hablan del dumping, falta de suministros, producción local cara. Son unos impresentables.
Todo lo que dice la nota viene sucediendo desde la industrialización y acá solo nos quejamos y adquirimos términos en otros idiomas para llorar quejas.