Fuente: Clarín – El lunes, durante la visita de Javier Milei a la Unión Industrial en la conmemoración del Día de la Industria, el titular de la UIA, Daniel Funes de Rioja, pidió el “urgente tratamiento” del proyecto de ley para inversiones destinadas a las pequeñas y medianas empresas. Se trata de un proyecto de norma que fue elaborado por la central fabril y fue presentada ante el Gobierno, con la expectativa de que sea enviada al Parlamento como la «ley RIGI de las pymes».
Según datos de la central fabril, desde comienzos de año, el 54% de las PyMEs registró una baja en la producción y la caída de las ventas afectó principalmente a los rubros de confecciones, cuero y calzado, metales comunes, minerales no metálicos y papel, cartón y madera. El 24% de las pequeñas y medianas industrias disminuyó el plantel o redujo los turnos y más de la mitad sufrió atrasos en la cadena de pagos.
El proyecto de ley consta de siete puntos, que incluyen una simplificación tributaria (Cuenta Única Tributaria) para facilitar la aplicación de saldos a favor de otros impuestos y agilizar las devoluciones.
Los industriales también piden que se excluya a las MiPyMEs de los regímenes de recaudación (retención y percepción IVA y IIGG) y que haya una alícuota única de Ganancias del 25% para el universo MiPyME. El proyecto contempla, además, la posibilidad de tomar Impuestos a los Débitos y Créditos a cuenta de todos los impuestos (incluyendo IVA y Seg. Social, no sólo IIG) y solicita estabilidad fiscal para las pequeñas y medianas industrias.
En su segundo punto, el proyecto solicita la creación de un régimen de incentivo a la inversión PyME industrial que tenga en cuenta la amortización acelerada en IIGG para inversiones en 2 años y doble amortización de inversiones de bienes de industria 4.0, eficiencia y/o transición energética y economía circular. En los casos de los bienes de capital de origen nacional, los industriales piden que se dé aplicación al Decreto 209/2022, que haya deducción de intereses sobre el capital propio y devolución anticipada del I.V.A. de la inversión.
La UIA también propone la reducción de contribuciones patronales para PyMEs del sector industrial con incentivos regionales para disminuir el costo salarial y mejorar la competitividad.
El cuarto punto del proyecto apunta a la actualización automática y transparente de los topes de ventas anuales de la categoría MiPyME y propone utilizar un índice público con frecuencia semestral.
Con respecto a la internacionalización PyME, la UIA solicita la eximición de los Derechos de Exportación, el aumento de los reintegros y un Nuevo Régimen de Admisión Temporaria para PyMEs proveedoras de cadenas exportadoras. Este quinto punto también contempla un programa de desarrollo exportador que incluye la asistencia técnica, la promoción en ferias y misiones comerciales y herramientas de financiamiento para la exportación.
En relación al financiamiento, el proyecto promueve ampliar y agilizar el sistema de Garantías Público y Privado, generar instrumentos y líneas para potenciar la inversión a mediano y largo plazo y dar Incentivos a la demanda de instrumentos PYME en el mercado de capitales.
Por último, la Ley PyME incluye la creación de una ventanilla única con trámites 100% digitales, la inscripción automática en las IGJ provinciales y la habilitación de libros de forma digital (IVA, Sueldos), sin duplicación en formato físico.
Funes de Rioja afirmó que la industria requiere de un escenario donde “nuestro costo argentino no haga inviable la competencia frente a países que no exportan impuestos, que cuentan con infraestructura que permite reducir costos, con regímenes laborales modernos adecuados a las nuevas realidades productivas y con medidas de protección ágiles frente a la competencia desleal”.
Por su parte, Martín Rappallini, presidente de la Unión Industrial de la Provincia de Buenos Aires, región que concentra mayor cantidad de PyMEs industriales dijo: «necesitamos tener una legislación clara para desarrollar a las pequeñas y medianas empresas y ayudarlas a exportar»