Fuente: Cronista – En un contexto de caída de la demanda interna, las pequeñas empresas locales requieren medidas concretas para recuperar su nivel de actividad.
Como consecuencia de la caída del consumo interno, la mayoría de las pymes argentinas tuvieron que ajustar, no sólo sus niveles de producción, sino que también sus plantillas de empleados. Esto quedó reflejado en el evento Mundo Pyme que organizaron El Cronista y la revista Apertura este jueves.
«A finales de año pasado y como consecuencia del faltante de dólares tuvimos que bajar nuestra actividad. En enero y febrero de 2024, volvió a caer a causa de las medidas económicas del nuevo gobierno para acomodar la macroeconomía. Hoy, sin embargo, el sector empieza a tener luces positivas y se está empezando a reactivar. Nos favoreció la baja de tasas y la de inflación. Eso hizo que se empezara a mover la demanda de los diferentes productos», aseguró José Del Boca, vicepresidente comercial de Ternium Argentina.
La compañía filial del holding de productoras de aceros planos del Grupo Techint, cuenta con ProPymes, un programa que nació en 2002 y que busca fortalecer el tejido industrial argentino potenciando la competitividad de las pequeñas y medianas empresas clientes y proveedoras.
«Trabajamos juntos en el diagnóstico para después poder hacer una asistencia que puede ser de gestión industrial, de recursos humanos, financiera y hasta de comercio exterior«, detalló el ejecutivo.
Una de las compañías que participó del programa fue Tromen. «Queríamos exportar y, luego de los cambios económicos del nuevo gobierno pudimos hacerlo. Sin embargo, el rol de Techint fue fundamental en este proceso: era difícil potenciarlo y desarrollarlo porque la rentabilidad era muy acotada», aseguró, Mariano Remondino, gerente comercial de la compañía.
En este contexto, el apoyo en términos de financiación por parte de la banca pública es indispensable. Juan Cuattromo, presidente del Banco Provincia, agregó: «No podemos obviar el contexto. Estamos en medio de un ciclo económico que, si bien algunos definen como un plan de estabilización, yo no lo creo así porque, de esa manera, el Gobierno debería intentar bajar la inflación con el menor efecto en términos de empleo y actividad».
Así, destacó que, del total de créditos que la banca pública entrega a las empresas, el 80% está destinado a una Pyme. «Tenemos foco en un sector que está sufriendo la crisis y la recesión», aseguró. Añadió, además, que, según datos del banco, en abril se registró una caída del consumo interanual del 35 por ciento.
«Aprendimos durante la pandemia que, cuando el banco desarrolla un conjunto de herramientas con tasas razonables y que atienden a las necesidades que genera un evento externo, las pymes cuidan mucho más los puestos de trabajo, por lo que nuestro foco hoy en día está puesto ahí», expresó.
En este contexto, el rol de las pymes será fundamental para la recuperación económica de la Argentina. «La pyme sabe que tiene que ser la protagonista de esta recuperación de la actividad económica. Con herramientas como crédito, previsibilidad, estado de derecho, una nueva ley laboral con la que pueda dar trabajo y una baja de la carga impositiva podría sacar adelante la Argentina y resolver todos los problemas de la macroeconomía local», sostuvo Roberto García Moritán, ministro de Desarrollo Económico de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
En este sentido, develó cuáles son los próximos planes del Gobierno de la Ciudad para simplificar la burocracia a la que se enfrentan las pequeñas empresas: «Tenemos pensada una dirección de simplificación de trámites en la que estamos trabajando para desburocratizar el Estado, que les hace la vida difícil a las pymes», finalizó.