Fuente: BAE – Postergar el ajuste de tarifas y bajar la inflación darán un respiro al poder de compra de los hogares, pidió la Cámara Argentina de Comercio y Servicios.
El indicador de consumo (IC) de abril de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC) marcó un retroceso del 4,5% en la comparación interanual (i.a.) y encendió una luz de alarma. Lo único que calmó un poco los ánimos fue que el incremento desestacionalizado de 0,6% frente al mes de marzo 2024 (descontando los efectos estacionales habituales del consumo a lo largo del año).
Este indicador creado por la CAC refleja la evolución del consumo de los hogares en bienes y servicios finales con una periodicidad mensual. Si se compara el IC acumulado vs igual período del 2023 marca una baja del 3,4%. “Continúa la tendencia bajista en las tasas de crecimiento interanual exhibidas por el IC a partir de enero y marcan en abril 2024 el mayor valor negativo del año”, aseguraron en la cámara.
Desde el sector hicieron un análisis del contexto en el que se dan estos números: “Esto se da en un escenario económico donde la inflación continúa desacelerándose y ha vuelto a un valor mensual de un dígito. En abril 2024 la mensual fue de 8,8%, con una interanual de 289,4% y una acumulada en los primeros cuatro meses del año de 65,0%”.
Pero si bien la tasa de inflación continúa desacelerándose, la CAC hace un llamado de atención y pide un respiro: “el principal rubro que contribuyó al incremento de precios durante el mes de abril fueron las tarifas de servicios públicos como gas y agua. Esto incrementó los gastos en vivienda y disminuyó el ingreso disponible de las familias. Sin embargo, la efectivización del cambio en la forma de ajuste de la movilidad jubilatoria en base a la inflación pasada, el bono de $70.000 para los perceptores del haber mínimo y ajustes salariales para los trabajadores formales en relación de dependencia traccionaron una leve recomposición de un ingreso disponible que estaba siendo castigado mes a mes. Recientemente, el gobierno anunció una nueva postergación al ajuste de tarifas y el sendero de desinflación debería continuar, dando un respiro al poder de compra de los hogares”.
Otro dato que apuntan para prestarle atención es que “el desempeño de la economía argentina y el consumo presentan un comportamiento similar, lo cual se expresa en tasas de variación interanual que, usualmente, se incrementan o reducen en la misma línea. En el 2024, las i.a. tanto del EMAE como del IC presentan un comportamiento inicial negativo. En abril, el IC atravesó una nueva contracción, mientras que la economía argentina mostró una nueva variación negativa durante febrero”.
Cuando se analiza con lupa el desempeño de algunos rubros, se observa una dinámica generalizada de decrecimiento interanual respecto a los valores de abril de 2023, a excepción de transporte.
Una radiografía de los principales sectores indica: el rubro de indumentaria y calzado mostró en el cuarto mes del año un decrecimiento estimado de 21% i.a., con una contribución negativa del 1,4% al retroceso de 4,5% i.a. del IC. La explicación es que cayó el ingreso real de los hogares en términos interanuales, y los gastos en ropa y calzado se tuvieron que postergar para poder llegar a fin de mes.
El transporte y vehículos mostró un incremento estimado del 2,1% i.a. en abril, contribuyendo positivamente en un 0,3% a la variación interanual del IC. “El aumento se explica por un nivel de patentamientos de automóviles que se mantuvo relativamente estable y un leve abaratamiento del precio de la nafta”, explican en la CAC.
El momento de ocio te lo debo
Los gastos en diversión, recreación y cultura se derrumbaron en abril. Los momentos y gastos dedicados a la distracción y al rélax mostraron un decrecimiento de 34% i.a. (con una contribución negativa de 2,6 p.p. al IC). Todo lo relacionado al ocio y a la distracción quedó pendiente para algún otro momento, no se sabe aún para cuando.
Los gastos en vivienda, alquileres y servicios públicos, mostraron un retroceso estimado de 2,3% i.a. en abril del presente año, por la baja de ingresos. Con respecto al resto de los rubros, estos experimentaron una contracción estimada de 0,8% i.a. en abril (y una incidencia de 0,4 p.p.), posicionándose en niveles 3% por encima de los niveles prepandemia.
La Cámara estima que el ingreso nominal promedio de los hogares argentinos es de $1.025.000 en el mes de abril 2024. “Ese ingreso implica una caída de 18% en términos reales. Al igual que en marzo las elevadas tasas de inflación, impactaron fuertemente en la capacidad de compra de las personas. El dato de abril 2024 presentó la mayor caída en la serie del IC que elabora la CAC, lo cual implicó una profundización de la pérdida real de poder adquisitivo de los individuos. Durante 2024, los datos muestran una tendencia claramente negativa, por efecto de la inflación y también por efecto de un reajuste del gasto de los individuos (además de cuantitativo hay un cambio cualitativo intentando reasignar los recursos en distintos bienes y servicios). El acumulado en 2024 respecto a 2023 refleja una caída del 3,4% y se espera que la evolución negativa continúe”.
Si se frena la suba de precios y aparecen los créditos con tasas más bajas, podría estabilizarse el consumo en los próximos meses.