Fuente: Cronista – Produce 90 millones de kilos de helado por temporada y cuenta con 1900 locales entre la Argentina, Uruguay, Paraguay, Chile y Perú. Su nuevo modelo de local forma parte de una estrategia innovadora de la compañía.
Grido abrió la primera heladería 100% digital. Solo se interactúa con una pantalla y se retira el producto a través de un box. Se trata del último proyecto de la cadena cordobesa que no solo es la principal productora de helado de la Argentina, sino que está dentro del top del negocio a nivel mundial.
En total elaboran cerca de 90 millones de kilos de helado por temporada en su fábrica en el Parque Industrial Ferreyra. Grido cuenta con más de 1900 locales distribuidos entre Argentina, Uruguay, Paraguay, Chile y Perú, donde abrieron su primera franquicia a fines de 2022. En menos de un cuarto de siglo, la firma pasó de ser un pequeño emprendimiento en barrio Alberdi a transformarse en el jugador más importante de su industria.
La familia Santiago ya tenía experiencia en el rubro antes de fundar el emprendimiento que los haría conocidos. En la década de 1920, Lucas Santiago se dedicaba a distribuir la marca de helados Laponia. Sus hijos siguieron dentro de la industria, aunque viraron hacia otro segmento con una fábrica de cucuruchos. Sin embargo, uno de ellos, Oscar Lucas, se abrió del proyecto y abrió Marvic, su propia heladería.
La idea detrás de Grido
La crisis económica de finales de los 90 puso en aprietos a la fábrica de los hermanos y Oscar Lucas Santiago fue a dar una mano. Para salvar a la planta era necesario vender más cucuruchos y la única manera de hacerlo era impulsando el consumo de helado, que en ese momento era de 3,5 kilos per cápita por año (la mitad de la cifra de consumo actual).
Entonces, Santiago desarrolló un plan que implicaba la creación de una cadena low cost. La estrategia consistía en locales chicos para ahorrar en costos y una producción que mezcle el sabor artesanal con el volumen industrial. Además, la marca se expandiría con franquicias para hacerlo más rápido y con menos inversión propia y se enfocaría en zonas que el resto de las cadenas hayan descuidado.
En 2000 Oscar Lucas Santiago abrió cuatro heladerías junto a sus hijos Lucas, Sebastián, Celeste y Gonzalo. También inauguró una pequeña fábrica de 50m2 que sería la proveedora oficial. La cadena se llamaba Criko, pero había un problema que no habían tenido en cuenta.
«Pensé que el nombre estaba registrado y lanzamos las franquicias. A los meses me entero de que ya estaba registrada por Nestlé así que tuvimos que salir a cambiarlas tratando de que sea lo mínima cantidad de letras posibles y quedó Grido. Aprendí la lección: hay que registrar todo», confesó Sebastián Santiago en 2018 durante un panel en Expo EFI.
Boom low cost
Primero se expandieron por barrio Alberdi con otros diez locales en 2000, al año siguiente ya contaban con 50 sucursales en Córdoba. En 2002 apuntaron al interior de su provincia natal y unos meses después cortaron cinta de franquicias en La Rioja, San Juan y Santa Fe.
«En esos años había muchas personas desempleadas con necesidad y ganas de trabajar, que además tenían algunos pesos que habían cobrado por la indemnización. Eso calzó bien con nuestro modelo de negocio, que no buscaba grandes inversores sino a personas con ganas de trabajar en su heladería, como una forma de autoempleo», contó el patriarca de la familia, en diálogo con El País.
La recesión de comienzo de siglo provocó un auge de las propuestas económicas, como Las Medialunas del Abuelo, Solo Empanadas y Grido, entre otras. Antes de llegar a Buenos Aires, la cadena cordobesa puso un pie en Chile en 2006 y ese mismo año se mudó a una planta de 6000m2 en el Parque Industrial Ferreyra, donde sumaron una fábrica de chocolate para cobertura. Su primera década de vida la cerró con 900 franquicias activas.
El laboratorio de negocios
A sus cucuruchos baratos bañados en chocolate le sumaron alianzas con marcas reconocidas para posicionarse en distintos target. Por caso, firmaron un acuerdo de cobranding con Mondelez y lanzaron un Sundae Go de Milka y Oreo, mientras que hicieron lo mismo con Toddy y su pote de 1 litro de helado y con Cadbury.
Pero Grido no enfocó solo en el mundo heladero. En 2014 sacó al mercado su línea de pizzas congeladas bajo la marca Frizzio. Durante su primer año vendieron 2 millones de unidades y expandieron la etiqueta a más productos, desde pechugas de pollo rebozadas hasta pastas, tartas y papas fritas.
La compañía también cuenta con una aceleradora de emprendimientos, Innfinito. Esta unidad opera como un laboratorio que hace alianzas con startups para desarrollar nuevos negocios para Grido. A través de este vertical crearon GoFriz, el marketplace de productos congelados; las heladeras inteligentes que tuvieron en sus locales como prueba piloto; y la heladería 100% digital que abrieron recientemente en Belgrano.