Fuente: Clarín – La producción fabril subió 3,1%, mientras la construcción se expandió 1,2% respecto del mismo mes de 2023. (INDEC – Marzo)
En marzo, la industria y la construcción dieron un paso adelante y se recuperaron tras la caída que ambos sectores habían exhibido en febrero. De acuerdo a los datos que difundió hoy el INDEC, la industria creció 3,4% en marzo con relación al mes anterior.
En términos interanuales, la actividad manufacturera se expandió en marzo un 3,1%, frente a la caída del 1,7% que había anotado en febrero respecto a igual mes de 2022. Y suma un incremento de 2,6% en lo que va del 2023.
Del lado de la construcción, el avance de marzo con respecto al mismo mes de 2022 fue de 1,2%. Con relación a febrero hubo una recuperación de 3,5%. En lo que va del año, el sector muestra una baja del 0,8%.
En febrero la construcción se había hundido 6,3% en la medición interanual.
Con los registros de marzo, ambos sectores ponen en pausa la retracción que venían mostrando, aunque se espera que esa tendencia negativa se retome en abril en medio de la disparada de la inflación y de los dólares alternativos.
De hecho, los economistas anticipan que la industria terminará este año con rojo en torno al 4%, una merma similar a la que se prevé para el producto bruto. De ser así cortará con una racha de dos años de crecimiento postpandemia. Para la construcción, las proyecciones marcan que el año cerraría con una leve baja.
«El año en curso se ve castigado por una severa sequía que se estima que reste en torno a US$ 18.000 millones de exportaciones. Por este recorte en la disponibilidad de divisas, esperamos que se mantengan y/o profundicen las restricciones a las importaciones de insumos para poder retener las reservas. Esto afectará la operatividad de la industria, por lo que proyectamos una caída de hasta 4% promedio anual respecto al año 2022″, plantea la consultora LCG.
En marzo, en la industria crecieron doce de las dieciséis divisiones, principalmente el rubro “vehículos automotores, carrocerías, remolques y autopartes”, con un 17,4% y “refinación del petróleo, coque y combustible nuclear” y “otros equipos, aparatos e instrumentos» con el 17,2%.
Las caídas más fuertes se dieron en las categoría de «madera, papel, edición e impresión» (-4,2%); «sustancias y productos químicos» (-3,6%); «alimentos y bebidas» (-0,8%) y «productos textiles» (-0,7%).
En 2022, la industria había crecido 4,3%, mientras que la construcción avanzó 3,6%.
En el caso de la construcción la expectativa es que se mantenga el crecimiento «aunque en un rango algo menor al exhibido durante 2022», señala LCG.
La consultora indica que lo que jugará a favor del sector este año serán «la alta informalidad que caracteriza al sector, en conjunto con una correlación significativa con la brecha cambiaria que abarata costos. Esperamos que ambos factores operen como un amortiguador para el año en curso«.
En la construcción, la ralentización de la actividad hacia finales del año pasado dejó un arrastre estadístico negativo del 5%, por lo que «esperamos que en el promedio del año el crecimiento sea negativo, aunque con una variación anual positiva medida entre las puntas», apunta LCG.
Los datos del consumo aparente de los insumos para la construcción en marzo de 2023 muestran, con relación a igual mes del año anterior, subas de 21,6% en mosaicos graníticos y calcáreos; 19,8% en hormigón elaborado; 18,5% en el resto de los insumos (incluye grifería, tubos de acero sin costura y vidrio para construcción) y de 6,4% en cemento portland.
Mientras tanto se observan bajas de 25,8% en artículos sanitarios de cerámica; 15,3% en pisos y revestimientos cerámicos; 12,8% en ladrillos huecos y 9,7% en asfalto.
El informe del INDEC también publica información sobre la evolución de los puestos de trabajo registrados en la construcción para febrero. Con 467.201 empleados registrados hubo un salto de 16,4% respecto al mismo mes del año anterior.
Por otro lado, la superficie autorizada por los permisos de edificación en metros cuadrados cayó 27,2% interanual en febrero, lo que da la pauta de que se retraería la actividad en los próximos meses.